Elecciones en Francia: ¡Derrotemos a la extrema derecha! ¡Luchemos por el comunismo!
El resultado de las elecciones europeas y la disolución de la Asamblea Nacional provocaron una onda expansiva cuyas repercusiones se suceden a un ritmo impresionante.
En la derecha, Republicanos y Reconquista estallaron en un coro de insultos. En cuanto a los diputados macronistas, avanzan, demacrados e impotentes, hacia el abismo insondable de una nueva debacle electoral.
En la izquierda, el FI, el PCF, los Verdes y el PS formaron inmediatamente un “Frente Popular” –durante la campaña electoral–. La mayoría de las confederaciones sindicales se han sumado y convocan a una movilización general contra la extrema derecha, en las calles y en las urnas. Cada día, en muchas ciudades de todo el país, miles de jóvenes se manifiestan espontáneamente para expresar su ira y su profundo rechazo a la extrema derecha. La perspectiva de un gobierno liderado por Jordan Bardella y su camarilla archirreaccionaria, en unas pocas semanas, está movilizando a nuevas capas de jóvenes y trabajadores a la acción. Las manifestaciones del sábado 15 de junio, convocadas por el “Frente Popular”, prometen ser masivas y radicales.
¿Qué hacer?
Révolution, que fundará el Partido Comunista Revolucionario el próximo otoño, llama a la gente a movilizarse en las calles y votar por los candidatos del “Frente Popular” el 30 de junio y el 7 de julio. Sin embargo, queremos hacer aquí varios comentarios y propuestas.
La reciente experiencia del fiasco de Nupes no puede borrarse con la constitución del “Frente Popular”. Si este “Frente” electoral gana el 7 de julio, los diputados de su ala derecha –y especialmente los del PS y los Verdes– serán muy sensibles a las presiones de la clase dominante, que exigirá el abandono de cualquier reforma progresista y la continuación de una drástica política de austeridad, en un contexto de estancamiento económico y deterioro de las cuentas públicas.
La experiencia del gobierno “socialista” de François Hollande, entre 2012 y 2017, no deja dudas al respecto. En lugar de atacar las “finanzas”, como prometió, Hollande atacó nuestras pensiones, nuestros derechos, nuestros servicios públicos y nuestras condiciones laborales. Además, no olvidemos que las sucesivas traiciones de los gobiernos de «izquierda» desde 1981 han jugado un papel decisivo en el ascenso de la extrema derecha, que ha seguido ampliando su electorado en las capas más explotadas y oprimidas de la clase trabajadora.
En otras palabras, la juventud y el movimiento obrero deben prepararse hoy para grandes movilizaciones sociales que exijan la implementación inmediata y la profundización del programa del «Frente Popular», si este último gana. Los jóvenes y los trabajadores no deben confiar en los “compromisos” verbales de Olivier Faure y compañía; ¡Sólo pueden y deben confiar en sus propias fuerzas!
Hasta la fecha, las encuestas dan ventaja a la RN, que recibió refuerzos de Eric Ciotti, Marion Maréchal y sus respectivas tropas. Pero en realidad, el equilibrio de poder puede cambiar significativamente en las próximas semanas. Ante el peligro de la extrema derecha, podría producirse un estallido de movilización entre los jóvenes y los empleados. Sin embargo, el movimiento sindical debe prepararse ahora para todas las eventualidades. La dirección de la CGT, en particular, debe anunciar que si gana la RN, el 7 de julio, se organizará una huelga general de 24 horas en el corto plazo, y que este será el primer paso de una amplia movilización de jóvenes y trabajadores. expulsar del poder a Jordan Bardella y su camarilla de demagogos racistas.
¡Únete al Partido Comunista Revolucionario!
La mayoría de los jóvenes y trabajadores que se han estado movilizando en las calles desde el 9 de junio tienen una prioridad en mente: impedir que la extrema derecha llegue al poder el 7 de julio. Precisamente por eso aprueban la constitución del “Frente Popular”. Esto es perfectamente comprensible. Sin embargo, debemos subrayar la contradicción directa entre el programa muy moderado del “Frente Popular”, como también su composición política, y el objetivo de poner fin definitivamente al peligro de la extrema derecha.
La extrema derecha prospera sobre la base de la crisis del capitalismo, por un lado, y de las traiciones de los principales partidos de la izquierda reformista, por el otro. Por eso los jóvenes y los trabajadores más conscientes no deben contentarse con apoyar al Frente Popular. Debemos apuntar más lejos. Debemos construir un auténtico Partido Comunista Revolucionario, un partido cuyo objetivo sea poner fin al capitalismo, expropiar a la gran burguesía y colocar las principales palancas de la economía bajo el control democrático de los propios trabajadores.
En unos meses, Révolution –que es la sección francesa de la Internacional Comunista Revolucionaria– fundará tal partido: el Partido Comunista Revolucionario. Defenderá las ideas y el programa del marxismo revolucionario. Para ayudarnos a construirlo, ¡únete a nosotros!
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